Mitos y verdades de los sistemas ERP

Existen algunos mitos en torno a la implementación de un sistema ERP.  Hace ya algún tiempo les contamos un poco sobre lo que son estos sistemas.  En líneas generales, un software de gestión empresarial se hace cargo de gestionar distintas operaciones dentro de una empresa, desde las finanzas hasta la producción, llegando incluso a los recursos humanos.  En suma, resuelven problemas de procesamiento de pedidos, errores y duplicidad de datos, entre otros. Pero, creemos que lo más importante, es que permiten tener la información necesaria para la toma de decisiones.

Ahora, los mitos giran en torno a temas diversos, desde los costos, hasta la complejidad del manejo de estos.  En este artículo aclararemos algunas de estas dudas y trataremos de resolverlas.

Algunos mitos y la verdad

Mito: son muy caros

Verdad: sabemos que uno de los inconvenientes más comunes es el costo del software. Esto se debe, normalmente, al nivel de personalización que se necesita para cubrir las necesidades de la empresa.  Además, es muy posible que, luego de la adquisición e instalación, surjan algunos costos adicionales, como por ejemplo: recursos internos para ejecutar el proyecto y capacitaciones al personal; que, aunque se vean como «adicionales», no son más que herramientas para mantener un adecuado funcionamiento. Hay que ser muy claros en que estos «costos ocultos», como los llaman muchos, son rápidamente recuperados gracias al incremento en la productividad que trae consigo contar con un ERP.

Más allá de esto, existen opciones para cada tipo de negocio y solo hace falta contactarte con un proveedor que te las pueda explicar.

Mito: solo las empresas grandes los adquieren

Verdad: la complejidad de los procesos de una empresa no tiene mucho que ver con su tamaño.  Puede que tus operaciones sean complejas y por ello, necesitas organizarte.  Un ERP está para eso, para hacerte la vida más fácil y para generar mayor productividad y eficiencia.  Además, como dijimos antes, existe una gran variedad de opciones, cada una de estas orientada a cubrir necesidades específicas.

Mito: las implementaciones son muy largas y complicadas

Verdad: las implementaciones son tan largas, como la empresa quiera que lo sean.  Si no tienes a personal dispuesto a ser capacitado y si tus procesos no están bien definidos, puede que esto termine siendo cierto.  Si se respetan los parámetros planteados por tu proveedor y si te tomas el tiempo suficiente para evaluar si estás listo para la adquisición de un ERP, puede que te ahorres tiempo y dinero en la implementación y esta resulte siendo más exitosa de lo que pensabas.  Aquí te dejamos un artículo que te podría ayudar con esto.

Mito: son muy difíciles de usar

Verdad: lo son, si es que no existen capacitación.  Y esto sucede con todas las herramientas que utilizamos al día de hoy.  En todos los escenarios hay una curva de aprendizaje y lo cierto es que, estos sistemas se hicieron para hacer que aquellas tareas manuales, pasen a ser automatizadas, simplificando procesos y evitando errores.  No son difíciles de usar, se necesita capacitación.  Lo lógico es que tu proveedor se encargue de esta parte.

Mito: no se adaptan a mi empresa

Verdad: existen sistemas ERP que vienen ya con procesos estructurados y que no permiten configuraciones o personalizaciones.  También existen otros que son altamente adaptables.  En todo caso, hasta los más estructurados terminan siendo beneficiosos, porque de requerir que tu modelo se adecue a buenas prácticas, entonces te está brindando la posibilidad de mejorar.  En otras palabras, algo que podrías considerar como una desventaja, podría terminar siendo una gran ventaja para tu negocio.

Si estás interesado en conocer qué es un ERP, te dejamos este documento o puedes contactarnos, dejando tus datos aquí.